Dimarts 26 de febrer a les 19:30
hores, xerrada-col·loqui:
" Aspectes tecnològics, ecològics i econòmics del vehicle elèctric",
amb Josep Mª Castells (Enginyer elèctric).
" Aspectes tecnològics, ecològics i econòmics del vehicle elèctric",
amb Josep Mª Castells (Enginyer elèctric).
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| Parts del cotxe elèctric |
Exposició de les diferències tècniques entre el vehicle elèctric i el vehicle amb motor de combustió interna, identificant els elements d'aquest últim que son prescindibles en el vehicle elèctric amb l’impacta corresponent en la simplicitat de la seva construcció i la seva eficiència energètica. Identificació dels efectes que podria exercir l'ús massiu del vehicle elèctric en la gestió de l'energia del sistema de subministrament d'energia elèctrica, així com el seu impacte en la participació de les energies renovables a la política energètica de nivell i selecció nacional en el seu conjunt, amb el seu impacte en la balança de pagaments. Exposició dels aspectes ecològics que pot obtenir amb l'ús de vehicles elèctrics amb menys emissions de CO2, òxids de nitrogen, etc., la generació més jove dels residus (oli, filtres, etc.) i la reducció de la contaminació acústica. Identificació dels efectes micro i macroeconòmics com a conseqüència de la proliferació del vehicle elèctric (creació de llocs de treball per a la implantació d'infraestructures de carrega de les bateries, proliferació d'energia eòlica etc.).
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Resum de la xerrada-col·loqui que va fer el nostre amic Josep Mª Castells el dia 5 de març de
2013 sobre el tema: “Aspectos tecnológicos, ecológicos y económicos del vehículo eléctrico
(VE)”. S’envia en castellà donat que l’ha fet ell mateix i preferim respectar la seva forma
d’escriure.
El VE con toma de corriente es muy utilizado por su alto grado de desarrollo tecnológico
(ferrocarriles, tranvías, teleféricos, ascensores, etc.), en cambio el VE autónomo (automóvil)
se usa aún poco por su escasa autonomía. Ello se debe a la baja densidad energética de su
“combustible” 0,2 KWh/kg de batería frente a los 13 KWh/ kg de gasolina contenido en el
depósito de combustible del vehículo de combustión interna (VCI). Aunque el rendimiento del
motor eléctrico (75%) es muy superior al del motor de combustión interna (25%), dicha enorme
diferencia en cuanto a densidad energética del “combustible” (65 veces superior a la del VCI)
hace que la autonomía del VE sea mucho más reducida.
El inconveniente de la reducida autonomía del VE se salva con la solución del vehículo híbrido
que funciona con electricidad pero también cuenta con un motor de combustión interna que
acciona un generador para generar la electricidad necesaria cuando la batería se ha agotado.
Resulta más caro por la duplicidad de sistemas (eléctrico y mecánico).
El diseño del VE con motor eléctrico acoplado a cada rueda es más simple que el del VCI
ya que no precisa una batería específica para el arranque pues su función la ejerce la batería
principal, no precisa caja de cambios, ni embrague, ni grupo diferencial, ni árbol de transmisión
(la energía se transmite por cable eléctrico a los motores de las ruedas), ni sistema de admisión
de aire (filtro, etc.), ni tubo de escape, ni silenciador, ni catalizador, ni circuito de agua de
refrigeración, ni bomba de gasolina, etc. Ello permite reducir el peso total aumentando así la
eficiencia energética. Además, su mantenimiento es más simple ya que tiene muchas menos
partes móviles
Siendo la electricidad un vector energético (no una fuente de energía), el VE puede usar energía
procedente de diferentes fuentes (hidrocarburos, hidráulica, solar, eólica, nuclear, etc) mientras
que el VCI solo puede utilizar hidrocarburos. Por tanto el VE puede hacer uso de las energías
renovables potenciando su desarrollo, lo que incide muy favorablemente sobre el desarrollo
ecológico y sostenible, y sobre la economía nacional (instalación de generadores eólicos, placas
solares, etc.).
El VE permite aprovechar la energía de frenado (frenado regenerativo) aumentando así su
eficiencia energética y por tanto ahorro de combustible.
En cuanto a los ventajas ecológicas del VE cabe destacar la reducción de la contaminación
acústica, la reducción de productos contaminantes que precisan reciclaje o eliminación (aceites
del motor y de caja de cambios, filtros de aire y aceite, zapatas de freno), ausencia de emisiones
de humos por tubo de escape, reducción de emisiones de CO2, SO2, NOx, etc., si la electricidad
empleada proviene de fuentes renovables
El uso de energías renovables para el VE permitiría reducir la contaminación de los mares por
los buques petrolíferos y reducción del riesgo de desastres ecológicos (Exxon Valdés, Prestige,
plataforma de BP en golfo de México, etc.)
En cuanto a aspectos económicos cabe destacar la economía del VE en comparación con el VCI
ya que con los precios actuales de 0,14 euros/KWh y 1,5 euros/litro de gasolina, el coste medio
para recorrer 100 Km con VE es de 2,01 euros y con VCI es de 7,05 euros. Sin embargo, hay
que señalar que un porcentaje muy importante del precio de la gasolina corresponde al impuesto
sobre hidrocarburos. Si se popularizase el VE, muy probablemente se establecería un impuesto
para la electricidad del VE, ya que los gobiernos no podrían permitirse una reducción de la
recaudación fiscal tan importante, con los que en parte se equilibrarían dichos precios.
La proliferación del VE crearía actividad económica local en la instalación y mantenimiento
de infraestructura de carga de baterías (tomas de corriente en vía pública, parkings, etc.) y
actividad económica a nivel nacional (instalación de generadores eólicos, placas solares, etc.)
a costa de la actividad económica en países productores de hidrocarburos. Además permitiría
diversificar las fuentes energéticas, evitando así monopolios, aumentando la seguridad de
abastecimiento energético, lo que conlleva una reducción del riesgo de conflictos armados
regionales.
